domingo, agosto 20, 2017

Dionisio de Siracusa condenó a trabajos forzados en las minas al poeta Filoxeno, que había criticado sus versos. 
Luego se arrepintió, mandó llamarle y ofreció en su honor un gran banquete, al final del cual leyó otros versos e invitó a Filoxeno a juzgarlos. 
Filoxeno se levantó y, haciendo un gesto a la guardia, dijo: "Llevadme a la mina".

(Extracto de "Historia de los griegos", de Indro Montanelli).